Rompiendo la Autoridad de la Maldición de Bastardía Christian Faith International Ministries PO Box 3037 T or C, NM 87901* USA E-mail: CarlCFI@aol.com * Web: www.CFIM.Net and www.KingdomFaith Ministries.ORG © 2004 Christian Faith International Ministries. All rights reserved. Permission freely granted to copy if copied in the entirety. pedimos en el nombre de Jesucristo que nos perdones por estar involucrados en los hijos ilegítimos. Nos arrepentimos por nuestro comportamiento y por el comportamiento de nuestros ancestros, retrocediendo diez generaciones. Sabemos que no podemos cambiar sus decisiones, pero sabemos por Tu Palabra Padre que Jesús murió en la cruz del Calvario para redimirnos de todas las maldiciones, especialmente ahora, te pedimos Padre, que nos redimas de la maldición de la bastardía. Clavamos el pecado, las transgresiones y las iniquidades de nuestros ancestros y las propias a la Cruz, desde hace diez generaciones en el nombre de Jesucristo. Te pedimos Padre, que Tu restaures las bendiciones en nuestras vidas, que podamos venir con libertad a la congregación del Señor, teniendo una dulce comunión contigo Padre, contigo Señor Jesús, y contigo Espíritu Santo, y muy importante, que podamos tener comunión con nuestros hermanos y hermanas en Cristo. Padre Te agradecemos Tu fidelidad. Ayúdanos a romper los patrones de hábitos que podamos tener por haber vivido bajo esta terrible maldición, en el nombre de Jesucristo Te lo pedimos y Te damos gracias por esta liberación. Amén. Si usted oró esta oración con nosotros en fe, con un corazón arrepentido, con perdón y agradecimiento, entonces usted está libre de la maldición de bastardía. Aquél a quien el Hijo libertare, es verdaderamente libre.42 Que maravilloso es saber que no tenemos que tolerar cuatrocientos años de esta maldición, que la cautividad de satanás sobre nosotros ha sido rota, que el espíritu de ofensa ha perdido su agarre. Usted debiera ser bendecido realmente. ¡Nosotros lo somos! Lo que acabamos de hacer juntos es grandioso. Nuestra experiencia ha sido que las personas que han sido liberadas de la maldición de bastardía ven enormes bendiciones en sus relaciones tanto en sus iglesias como en sus cuartos de oración. Pero ¿por qué detenerse aquí? ¿Por qué no alcanzar a los miembros de sus familias? Ahora que hemos sido liberados de la maldición de bastardía, por el precio que Jesús pagó en el madero, vayamos a las ovejas perdidas y dispersadas, y ayudémoslas a venir de regreso al aprisco. Explíquenles esto, o permítanles leer una copia de este documento. Este libro sería un maravilloso regalo para ayudar a que sus seres queridos sean liberados. Cuando comprendan el por qué de esta maldición, y usted ore con ellos y les motive a regresar a la congregación del Señor, entonces podrán estar juntos todos, aún si hubiesen cabras. El Señor Jesús regresará por una iglesia gloriosa cuando vuelva. Creemos que el romper la maldición de bastardía que ha inhibido la comunión con Dios de nuestros hermanos y hermanas es importante para ayudar a ser más gloriosa a Su iglesia. Si nosotros, las ovejas del prado del Señor, velamos el uno por el otro, y nos unimos, nosotros no tendremos que rechazar a las cabras. La batalla es del Señor. Nosotros nos mantenemos unidos en amor, motivándonos y ayudándonos los unos a los otros, y la autoridad de esta terrible maldición se derretirá hasta convertirla en un mal recuerdo. Creemos con todo nuestro corazón que esta es la verdad.
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